Aunque el cuero es un material duradero, se seca con el tiempo, especialmente cuando no se cuida con regularidad. Los zapatos de cuero pueden verse agrietados o tener una superficie áspera, dejándolos con una apariencia monótona. El tratamiento de los zapatos de piel no solo requiere un acondicionamiento sino también una buena limpieza para eliminar la suciedad incrustada. Después de una limpieza y un acondicionamiento adecuados, los zapatos de cuero pueden volver a verse como nuevos.
Necesitará:
Detergente líquido, paño, betún, paños de microfibra y spray acondicionador de cuero
Pasos a seguir:
1. En primer lugar, cepilla tus botas de piel con un cepillo suave, sin rallarlas. Es importante que si te manchaste los zapatos con barro, lo limpies lo antes posible porque el tiempo terminará dañando la tela de cuero.
2. Cuando vea sus botas, sabrá si el cuero está tratado o no. Si está tratado o “terminado” será menos poroso, pero si no está tratado, será más susceptible a las manchas de agua.
3. Si tus botas están terminadas, compra un esmalte para botas y aplícalo a tus zapatos con un trapo.
4. Si el cuero de tus botas no está acabado, el aceite es ideal para pulirlo, frotándolo con un paño. La cera caballo también es ideal, e incluso la crema neutra para el cuerpo.
Cuando hayas tirado cualquiera de los dos productos -esmalte o aceite- retira el exceso con un paño seco, asegurándote de haber cubierto todas las costuras y cierres.
5. Quítese los cordones de los zapatos, si los tiene, y lávelos por separado a mano con una cucharadita de detergente líquido. Enjuague los cables por completo y déjelos secar al aire.
6. Limpia el polvo y la suciedad del exterior y el interior de los zapatos de cuero con un paño. Coloca una cucharada de betún sobre un paño de microfibra limpio.
7. Sostener el interior del zapato con una mano y frotar con la zona de la piel bituminosa, comenzando por la parte trasera del zapato. Haz pequeños movimientos circulares, cubriendo completamente los zapatos de cuero. Repita con el otro zapato.
8. Dejar secar el betún durante dos o tres horas. Limpie cualquier exceso con un paño de microfibra limpio.
9. Rocíe bien los zapatos con un acondicionador de cuero, o acondiciónelos con una o dos cucharadas de aceite en un paño de microfibra y frote junto con los zapatos.
10. Permita que el acondicionador penetre en la piel durante 10 minutos. Retire cualquier exceso de acondicionador con un paño limpio.
Evita que tus zapatos se dañen en el futuro.
Para evitar futuros daños en tus botas, antes de cada temporada debes realizar este tratamiento. Rocíe sus botas secas y limpias con un spray a prueba de agua que ayudará a prevenir las manchas. Una buena idea es alinear todas tus botas y tratarlas al mismo tiempo.
Guarda tus zapatos en un lugar seguro
Cada vez que quieras dejar secar tus botas, ya sea después de un lavado o porque la lluvia las haya mojado, déjalas en un lugar con temperatura alta, pero NO en un lugar que esté en contacto muy directo (como en un radiador). Si la temperatura es demasiado fuerte puede hacer que el cuero se rompa. No guardes tus botas en bolsas de plástico, ya que el cuero necesita respirar y la falta de aire puede hacer que se seque. Y siempre antes de dejar tus botas para el próximo invierno, asegúrate de limpiarlas previamente.
Con estas instrucciones podrás disfrutar de unos zapatos de piel que volverán a lucir como nuevos.
Leer más: Cómo suavizar el cuero: zapatos, guantes, botas y otros accesorios